 |
| Doris preparando pasteles |
Víctima
de la degradación económica, sin estudios profesionales y con un préstamo hipotecario
en las costillas esta mujer saltó la barrera del desempleo y convirtió su
talento en un producto saboreado por muchos.
Madre
de tres varones y abuela de cinco niños, la añasqueña Doris Rodríguez se bautizó
como la pastelera del pueblo. Esta ama
de casa se prepara todo el año para la navidad. Momento que a su juicio es la época más
agotadora, aunque reconoce que vende todo el año. Nunca tomó un curso de
cocina, lo que sabe lo aprendió de su madre y porque le gusta inventar.
“Mi
especialidad son los pasteles, a la gente le encantan. Mis clientes son fieles.
El que los prueba siempre regresa a comprarme más. Pa’ Acción de Gracias vendí más
de 70 docenas”, aseguró Doris, mientas su nieta más pequeña corría por la
cocina.
Los
pasteles de Doris son hechos con productos locales y de la manera más
tradicional posible. Le compra los guineos, la yuca, la yautía, las hojas y las
ramas de palma a agricultores del mismo pueblo. “Con suerte mi cuñado me regala
guineos de su finca, pero casi siempre los compro”, comentó.
Los
pasteles se pueden preparar de varios sabores y diferentes productos, pero ella
los hace solo de guineo, yuca, yautía y rellenos de pollo o cerdo.
“No
es un trabajo fácil, porque me gusta comprar todo fresquecito y venderlos
rápido. Si los dejas mucho tiempo en el “freezer” (refrigerador) le cambia el
sabor”. Doris casi siempre comienza comprando las hojas de la mata del guineo y
las ramas de la palma de coco. Las hojas de guineo son para envolver el producto y requiere amortiguarlas
con fuego y luego cortarlas en el tamaño indicado para que sean manejables. De la rama de la palma solo
utiliza una parte que se desprende de las largas hojas y es tan resistente como
un cordón de algodón. Ese cordón natural es para amarar el pastel luego de
terminado.
Lo
próximo que compra es la carne fresca de cerdo y pollo. Siempre prefiere usar
la carne del país ya que, según su
criterio se cocina más rápido y tiene mejor sabor, aunque más costosa. El proceso implica tener
que repicar la carne en pequeños trozos, sazonarla y cocinarla. Esta tarea por
lo regular le toma todo el día.
La
próxima odisea es preparar la masa, ya sea de guineo, yautía o yuca. En los tres casos hay que
desprender la cáscara y guayar la vianda una por una.
Luego
de tener cada uno de los elementos listo, saca a toda su familia de la casa
para evitar distracciones. Doris asegura que tiene truquitos y secretos a la
hora de hacer pasteles. “Puedo estar más de 20 horas de pie haciendo esto. Me
canso pero tengo que pagar los billes (cuentas)”, añadió.
En
el área metro una docena de pasteles cuesta de 20 a 25 dólares. Doris la vende
a $15. “Me da penda subir los precios, no me atrevo a decirle a mis cliente que
los voy a subir”. En cambio, ésta reconoció que para el próximo año sería
inevitable ajustar el precio porque todos los productos aumentaron.
La
pastelera asegura que siempre le gustó cocinar pero lo hizo en pequeñas
cantidades. “Yo siempre cociné para los nenes y Mickey (esposo), pero cuando me
quedé sin trabajo y vi que se me hacía difícil conseguir otro, comencé a hacer
pasteles para vender”.
Los expertos y la calle habla
 |
| Portal Instututo Estdísticas de PR |
Datos
del Instituto de Estadísticas de Puerto
Rico no asustan a Doris. Estos estiman que para julio de este año unas 174 mil personas estaban “Empleadas por su Cuenta” y luego la misma estadística, del mes de
septiembre, reflejó una reducción de
15 mil empleos en este sector.
 |
| Portal Instituto Estadísticas de PR |
Si se compara la estadística "Empleados por su cuenta" con meses anteriores, esta refleja una aparente inestabilidad de empleos . También la misma estadística pero del año 2011 sigue reflejando una reducción de empleos en el sector.
En cambio la estadística de Empleo y Desempleo refleja que de septiembre 2011 a septiembre 2012 hubo un aumento de casi 13 mil personas empleadas. Es probable que el sector de personas "Empleadas por su cuenta" haya disminuido porque consiguieron un trabajo en otro sector.
“Yo
hago lo mío, sé lo que es estar sin trabajo. Yo hago de todo para buscármelas”,
afirmó la cocinera sin miedo.
“En
el caso de Puerto Rico hay que mirar no solo el contexto global sino que el
modelo de desarrollo que tenemos caducó, que es el llamado modelo de desarrollo
Manos a la Obra que se implantó para traer capital exterior como las
farmacéuticas, petroquímicas y otro tipo de industrias para supuestamente darle
empleo a la gente”, dijo Tania García, catedrática del Departamento de
Psicología de la Universidad de Puerto Rico, y publicado en el portal de
noticias NotiCel.
Por
otro lado las redes sociales se han inundado de cuentas que hacen referencia a
la precaria situación. En otros casos las personas en sus propios perfiles
lloran la pena de estar sin trabajo. Páginas como Puerto Rico Sin Trabajo y Empleos
de Puerto Rico sirven de confesionario y buscadores-promotores de empleo.
La autosuficiencia de esta mujer rompió las cadenas de la dependencia y logró convertir su vida en una sin ataduras económicas.
Para
Doris lo más importante es no quedarse sin su casa y sin comida. “Hago coquito,
flanes, brazo gitano, cup cakes, sangría, de to’. Siempre lo voy hacer, es mi
forma de vivir, es la forma en que puedo sobrevivir”.
